Hay jinetes de luz en la hora oscura
Pablo Casado Muriel | 08 de marzo de 2020
Cuatro mujeres de épocas muy distintas que aportan valores que no distinguen de sexos y que son capaces de transformar el mundo.
“Hay mujeres que cambian la historia”. Puede parecer una perogrullada, y más en los tiempos que corren, pero nunca está de más recordar su importancia en el devenir de la humanidad. Eso sí, como recordaba Carmen Fernández de la Cigoña, directora del Instituto CEU de Estudios de la Familia, en la presentación del I Ciclo: El genio femenino que cambia el mundo, “el papel fundamental de la mujer no es luchando contra el hombre, es trabajando juntamente con él”. Y esta afirmación sí puede resultar transgresora en un contexto marcado por un feminismo entendido por algunos como guerra de sexos.
En este primer ciclo, que se enmarca en la celebración del Día de la Mujer, se presentaron cuatro figuras que dan un nombre propio a esos personajes femeninos capaces de cambiar la historia. Se habló de Rut y Noemí, cuya historia recoge la Biblia; Christine de Pizan, intelectual francesa del siglo XV; Isabel la Católica, fundamental para entender la historia de España; y Doroty Day, periodista norteamericana que fue capaz de llevar a la práctica la Doctrina Social de la Iglesia.
El libro de Rut apenas ocupa cuatro breves capítulos dentro del Antiguo Testamento. Su historia, en palabras de la profesora titular de Historia Antigua de la Universidad CEU San Pablo Mar Gabaldón, “ha pasado desapercibida” al lado de otras mujeres del pueblo de Israel como Sara o Judit. Sin embargo, la historia de una viuda, Rut, que se queda al lado de su suegra también viuda, Noemí, supone un verdadero “prototipo de valores familiares”. Entendiendo que viudas y huérfanos eran el colectivo “más desprotegido de la Antigüedad”, la decisión de Rut la convierte en una heroína cuyo relato “se enmarca en la vida cotidiana”.
La solidaridad de Rut es contagiosa y, tras emigrar junto a su suegra, fueron recibidas por un hombre rico de Belén, Booz, que acogió a las mujeres y acabó por tomarla como esposa. El libro de Rut concluye anunciando el nacimiento del hijo de ambos, que acabaría siendo abuelo del rey David. Ante esta circunstancia, explica Mar Gabaldón cómo la propia genealogía de Cristo se sustenta en una “extranjera”.
Y es que la vida de estas dos mujeres del Antiguo Testamento pone de manifiesto problemas como el empobrecimiento, la inmigración o la soledad de los ancianos, todos ellos transportables a nuestro siglo XXI. La actitud de Rut frente a ellos, concluía la profesora de Historia Antigua, demuestran cómo “desde la vida cotidiana, hay valores contagiosos que no cambian”.
No es fácil encontrar mujeres intelectuales en la Antigüedad. Las barreras para acceder a los estudios superiores reducen la lista y provocan que, en algunos casos, “se incluyan mujeres entre las figuras destacadas de una época por el simple hecho de ser mujeres”. En el caso que nos ocupa, el de Christine de Pizan, Alejandro Rodríguez de la Peña, profesor titular de Historia Medieval en la Universidad CEU San Pablo, es categórico: “Estamos ante la intelectual más brillante de la Francia del siglo XV, sea hombre o mujer”.
Hija de una familia de la corte francesa, tuvo acceso a una educación exquisita. La muerte de su marido, su padre y el monarca que protegía a los suyos obligó a Christine de Pizan a recurrir a sus estudios para ganarse la vida, “convirtiéndose en la primera editora de sus propios libros” y “primera mujer capaz de mantenerse económicamente con ellos”, una circunstancia complicada incluso entre los escritores actuales, recordaba Rodríguez de la Peña.
La leyenda negra en torno a la Edad Media habla de un machismo exacerbado en esta época, pero la realidad es que los siglos posteriores fueron todavía más misóginos. En el siglo XIV se abrió la conocida como “querella de las damas”, que se preguntaba si la mujer tenía las mismas capacidades intelectuales y para la virtud que el hombre, siguiendo algunas ideas de Aristóteles.
Christine de Pizan se atrevió a rebatir al estagirita y a aquellos que habían escrito contra el intelecto femenino, en un libro titulado La ciudad de las mujeres. En su texto defiende que la mujer tiene el mismo talento intelectual que el hombre y que la razón, el derecho y la justicia argumentan en favor de esta igualdad. La autora presenta una ciudad habitada por mujeres y protegida por una muralla construida con piedras que representan a grandes figuras de la historia.
Un compendio de mujeres excepcionales que ha convertido a este libro y a Christine de Pizan en una pensadora recuperada por el feminismo de los siglos XX y XXI. Pero, ante ciertas tendencias que toma esta ideología en la actualidad, recordaba el profesor Rodríguez de la Peña que “el feminismo de Pizan no es anticristiano ni tiene intención de destruir sus valores”; es más, en esa ciudad de las mujeres la reina es la Virgen María, rodeada de otras 25 santas. “Un feminismo rupturista con su tiempo, pero no secularista”, concluía el profesor de Historia Medieval.
“Isabel I transformó Castilla, España y el mundo durante su reinado”. Carlos Pérez, profesor titular de Historia del Derecho en la Universidad CEU San Pablo, se mostraba tajante a la hora de valorar la relevancia de esta mujer en la historia y explicaba que “el Evangelio y su fe en Jesucristo” deben entenderse como su inspiración a la hora de gobernar.
Es difícil resumir la ingente cantidad de cambios políticos, sociales y religiosos que se producen en España bajo el reinado de Isabel la Católica. Sin su “genio decidido” no se entiende el final de la Reconquista, reconocía Carlos Pérez, y la conquista de América puede definirse como “uno de los hechos más destacados de la historia universal”. Frente a aquellos que hablan ahora de genocidio indígena y otros términos similares, el profesor de Historia del Derecho recordaba “las disposiciones legales implantadas por Isabel desde el primer momento”, siempre en favor de los indígenas.
La labor de Isabel la Católica es tan vasta que llegan a olvidarse pragmáticas revolucionarias como la que firma en Medina del Campo en 1480 y que reconoce el derecho de los súbditos a trasladarse a vivir a cualquier lugar y a llevar consigo sus pertenencias. Un texto que, en palabras de Gregorio Peces-Barba, uno de los padres de la Constitución, puede considerarse como “uno de los primeros textos modernos sobre derechos fundamentales”.
El reinado de Isabel “no tiene parangón en Europa”, comentaba Carlos Pérez. Puede decirse que estamos ante una gobernante que piensa en el bien común de sus súbditos y que es capaz de conseguir “una forma de ver al hombre más justa y digna”. Su labor puede considerarse como la de “una católica en la vida pública” y, por ese motivo, su causa de beatificación sigue abierta.
Periodista, bohemia en una juventud en la que llegó a abortar, encarcelada dos veces por su militancia anarquista… y sierva de Dios. La vida de Dorothy Day rompe con los estereotipos del catolicismo y demuestra que, cuando uno se pregunta por el sentido de la vida, “el Sentido sale a su encuentro”, como reconocía Elena Cebrián, profesora de Teoría de la Comunicación y de la Información en la Universidad CEU San Pablo, durante la presentación de la mujer que cerró el I Ciclo: El genio femenino que cambia el mundo.
En pleno crac del 29, Dorothy Day se preocupaba por las graves injusticias sociales que se vivían en Estados Unidos y encontró respuestas en el magisterio de la Iglesia. A partir de ese momento, funda el Catholic Worker Movement junto a Peter Maurin, un hecho que sirvió a la profesora Cebrián para poner en valor un feminismo que no ve al hombre “como un enemigo, sino como un complemento para hacer algo valioso”.
El movimiento de Dorothy Day y su compromiso con la justicia social se materializó en un periódico que sigue publicándose hoy en día, comunidades agrícolas en las que dar empleo a personas necesitadas y también en casas de hospitalidad que ya se expanden por más de diez países.
Cuatro mujeres de épocas muy distintas que aportan valores que no distinguen de sexos y que son capaces de cambiar el mundo.
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