Hay jinetes de luz en la hora oscura
José María Legorburu | 16 de agosto de 2017
Tras las primeras experiencias de los pioneros acaecidas en Estados Unidos y en Europa durante la década de los 10 del siglo XX y el surgimiento de las primeras emisoras unos 10 años después, empiezan a aparecer en Estados Unidos academias dirigidas por reputados locutores, como es el caso de la Floyd Gibbons’ School of Radio Broadcasting, radicada en Washington (por la que pasó el locutor hispano-chileno Bobby Deglané).
De manera paulatina, la formación en radio fue evolucionando con el tiempo, a medida que la radio se iba desarrollando como medio de comunicación informativo, incrementando su influencia sobre la opinión pública. En 1932, Dovifat y Wagenführ impartieron el primer curso de radio en la Universidad de Berlín. Más tarde, los servicios públicos de radiodifusión de Gran Bretaña, Italia y la propia Alemania crearon sus propios cursos de formación (destinados a su personal) y, al terminar la II Guerra Mundial, estas experiencias cristalizaron en la creación de centros de formación en las radios públicas europeas. Entre tanto, en Estados Unidos la radio iba entrando en la Universidad de la mano del Periodismo, de manera que, en los años 40, los planes de estudios las escuelas de Periodismo comienzan a incorporar asignaturas específicas sobre radio, siendo uno de los centros pioneros la de la Universidad de Missouri.
el 13 de agosto de 1971 la formación en Comunicación en España pasó, definitivamente, a la Universidad
Simultáneamente, en España, el Régimen pone en marcha, más como herramienta propagandística que otra cosa, las denominadas estaciones-escuela, una iniciativa formativa, que no surgió como tal, sino que tuvo un recorrido previo hasta sustanciarse y consolidarse. De esta forma, hubo grupos de Arte Radiofónico del Frente de Juventudes, se creó la Academia de Radio Juventud, el Servicio Escolar Radiofónico San Antonio de Padua y, por fin, en 1947, surgieron las primeras estaciones escuela. La primera fue Radio SEU –estación escuela nacional– convertida poco después en Radio Juventud de España y radicada en Madrid. Tras la emisora central surgen tres grupos de estaciones-escuelas: provinciales, comarcales y locales. Además de las estas, funcionaron medio centenar de grupos y estudios, en los que se formaron numerosos profesionales.
Algo más tarde, las escuelas de Periodismo, tanto las oficiales como las de la Iglesia, supieron reconocer la importancia creciente del medio, consolidaron sus enseñanzas y sembraron el terreno para su incorporación a los planes de estudios de las futuras titulaciones universitarias. En concreto, la primera iniciativa para incorporar la radio a la formación de los periodistas fue efectuada por la Escuela Oficial de Periodismo de Madrid. Autorizada en 1941, fue en la reforma del plan de estudios de 1954, cuando se incluyó a la radio como asignatura optativa. Tres años después, el plan de estudios de 1957 incorporó un seminario, también optativo. Estos mismos planes de estudio fueron reproducidos por las EOP de Barcelona y de Las Palmas de Gran Canaria. Esta materia también se incorpora en 1958 al Instituto de Periodismo del Estudio General de Navarra de la mano de Antonio Fontán y con José Luis Martínez Albertos como primer profesor, al que más tarde auxiliarían Ángel Faus, Manuel Martín Ferrand e Iñaki Gabilondo.
Años después, tras la fundación en 1959 de la Escuela de Periodismo de la Acción Católica de Valencia, en 1960 echó a andar la de la Iglesia de Madrid (EPI), promovida por monseñor Herrera Oria y respaldada por la Conferencia Episcopal. Desde su inicio contó con una asignatura teórica de radio impartida por Aníbal Arias, director de la ya mencionada Radio SEU. En 1964 asumieron su plan de estudios las EPI de Valencia y Barcelona. Más aún, Herrera Oria y otros miembros del Episcopado, como monseñor Pedro Cantero Cuadrado (uno de los principales impulsores de la primera hora de la Cadena COPE) barajaron la posibilidad de crear una Escuela de Radiodifusión de la Iglesia, una iniciativa que, finalmente, no prosperó.
En 1967, se fundó la Escuela Oficial de Radio y Televisión, si bien con un marcado carácter tecnológico y experimental y destinada, sobre todo, a formar al personal técnico de RTVE en sus diferentes escalas. También durante estos años, a modo de lo que hoy sería un Máster, la Cadena SER creó su Gabinete de Estudios. En concreto, a partir del año 1970 y durante poco más de una década, lo dirigió Joaquín Peláez, con la ayuda del Jefe de Continuidad, Ángel Carbajo, y de periodistas y locutores como Antonio G. Calderón, Vicente Marco o José Luis Pecker, auténticos maestros del medio.
Finalmente, después de haber sido una reclamación constante en los más diversos foros profesionales y académicos y de superar toda suerte de vicisitudes, el 13 de agosto de 1971 la formación en Comunicación en España pasó, definitivamente, a la Universidad y con ella, la de la Radiodifusión, en las primeras facultades de Ciencias de la Información, fundadas en el seno de las universidades Autónoma de Barcelona, Complutense de Madrid y de Navarra. Pronto les seguirían muchas otras.